domingo, 12 de octubre de 2014

POR AQUÍ SEGUIMOS…

Mujer escribiendo - Thomas Pollock Anschutz Pues por aquí, seguimos…

     Decir que , de momento, sigo trabajando. Terminé un contrato y me hicieron otro de otras vacaciones…

     Por lo demás, las cosas en casa siguen como siempre. Así que no voy a aburriros.

     Quería comentar algo sobre la catástrofe provocada por nuestro desgobierno con relación al ébola.

     Me parece vergonzoso que se trajeran a dos infecciosos sin tener en cuenta consideración alguna, excepto el “porque nos da la gana a nosotros y punto”. No hay dinero para nada en este país. Gente desahuciada, sin luz, sin agua, sin comida. Escolares desnutridos y con medios mínimos para una educación y una sanidad desbordada. Pero, cuidado, hay dinero para traer a dos enfermos a un hospital que estaba en condiciones de atenderlos… antes de que el desgobierno decidiera desmantelarlo y despedir a los profesionales…

     Ahora, el ébola está en nuestro país y, de nuevo, el desgobierno hace gala de su ineptitud, haciendo lo que le sale de los huevos en lugar de oír a voces expertas. No contentos con matar a un animal sin tener idea de si estaba o no enfermo, con nulas medidas de protección o saltándose el protocolo de actuación, ahora en el colmo de la hijoputez, acusan a la enfermera de mentir, esconderse y, prácticamente de contagiarse por inepta… o sea, la culpan a ella de lo que ellos son culpables.

     No contentos con esto, se aplauden a sí mismos, hacen el paripé yendo al hospital donde está ingresada la enfermera y los posibles contagiados por contacto con ella… Y encima, siguen decididos a traer enfermos aún sabiendo que son incapaces de controlar la situación y siguen empeñados en desmantelar el hospital Carlos III…

     Nunca, jamás, he votado a esta gente. Yo sabía que cuando entraran en el gobierno, sólo tendríamos desgracias y privación de derechos… El dinero que iba a entrar en el país gracias a ellos (según algunos), está en sus bolsillos y en sus cuentas de Suiza. Ahora tengo más claro aún que no les votaré jamás y que celebraré (si seguimos vivos cuando se vayan) una fiesta cuando se termine su mandato y se vayan al carajo (que dimitan es una utopía, no tienen decencia alguna para tomar una decisión así).

     Son basura, un verdadero virus que ha infectado este país de mala manera y lo han llevado a unos niveles insoportables. Ojalá todo esto sirva para que en las próximas elecciones les demos la patada y exterminemos este cáncer infecto que nos desgobierna.

     Mientras tanto, deseo desde aquí a la enfermera, Teresa, que se recupere y que se decida a denunciar todos los desmanes que han hecho con su familia.

#Gobiernodimisión